La última cosecha de la temporada otoño/invierno fue exitosa y el excedente de productos se distribuyó en diferentes comedores. Las agrupaciones sociales enmarcadas en el proyecto preparan la tierra para la futura siembra primavera-verano.
Con la producción de la última cosecha en la que se recolectaron 230 kilos de acelga, y con el inicio de la siembra de la temporada estival, el programa Banco de Alimentos que impulsa la Municipalidad de Trelew en conjunto con Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y las organizaciones Cooperativa El Esfuerzo, Oleada Feminista, Libres y Diverses, Barrios de Pie y la Coordinadora de Trabajadores Desocupados Aníbal Verón, va perfilando un balance productivo en crecimiento.
En virtud de los resultados de las cosechas, los impulsores y técnicos de la propuesta avizoran una proyección muy óptima por los resultados obtenidos en esta primera etapa de la iniciativa que tiene como fin producir y abastecer de productos frutihortícolas a los sectores más vulnerables de la población.
Itatí Jones, ingeniera agrónoma y extensionista del programa Pro Huerta en la Agencia de Extensión Rural VIRCh de INTA, trabaja y capacita a los grupos comunitarios en la autoproducción de alimentos, remarcó que «hay un balance positivo de la producción, y del trabajo de los participantes en esta propuesta que plantea una producción totalmente agroecológica, donde se quiere demostrar a la sociedad que se puede volver a producir como se producía antes, volver a la utilización de los granos y dejar de lado los fertilizantes y agroquímicos para llegar a la población con alimentos sanos y generar el proceso de comunidad que se tiene muy perdido, y que las agrupaciones pudieron resurgir trabajando en conjunto».
Última de la temporada
La profesional resaltó el trabajo conjunto con el municipio e indicó que «se realizó este jueves la última cosecha otoño-invierno de acelga. Se recolectaron 230 kilos del rebrote de la siembra, y se espera en los próximos días un corte más donde se van a sacar otros 200 kilos para luego incorporar al suelo y volver a sembrar». Además, «en el otro Banco se está trabajando con rúcula, espinaca, lechuga y zanahoria que tiene un ciclo más largo para cosechar».
Respecto a los resultados señaló que «se obtuvo una producción muy buena, que superó expectativas, por lo que los productos no solo se destinaron al autoconsumo, sino que los grupos salieron a distribuir los excedentes a los diferentes comedores para llegar a otros lugares con el producto».
Siembra
En cuanto a la preparación para la siembra de esta temporada Jones dijo: «El viernes se comenzó con la siembra primavera- verano 2020/2021 sembrando maíz y variedades de zapallos: zapallito verde, calabaza, zapallo plomo. El trabajo es continuo porque en diez días se realizará el trasplante de tomate para cosechar a mediados de enero. Se empieza la siembra para llegar a la fecha de madurez aproximadamente en febrero/ marzo».
Además, señaló que «hay otros cultivos que son de motivación como lo es el zapallito verde que en 45 días se estará cosechando», y remarcó que «el trabajo continuo que se lleva adelante con los participantes permiten dimensionar un buen desempeño de los cultivos».
Formación para nuevas oportunidades
Itatí Jones remarcó que «siempre antes de la siembra, se realiza una capacitación donde se explica todo el proceso de siembra, preparación del suelo, para que cada participante de la organización social pueda replicarlo al resto del grupo y para motivarlos a seguir formándose para poder como grupo poder salir a prestar servicios a productores que dejan de hacer ciertas actividades y necesitan personas capacitadas y con conocimientos en siembra y cosecha de determinados cultivos», teniendo en cuenta que «la horticultura en nuestro Valle si bien los mantienen los productores de la comunidad boliviana el resto se han transformado en forrajeros.Hoy estamos en un proceso de transición donde se está mirando volver a la horticultura y muchas veces falta mano de obra para ciertas actividades, por eso es una motivación a que sigan esta capacitación para tener otras oportunidades».
«En esta etapa se ve a los grupos están más consolidados, que hay un avance, no solo es un crecimiento del Banco de Alimentos sino un crecimiento personal, porque están más rápidos, hacen las actividades sin necesidad de una explicación recurrente, se interesan, se motivan, vienen con más entusiasmo y lo que se va viendo es una pertenencia de lugar, pertenencia al Banco de Alimentos por parte de las cinco agrupaciones que vienen trabajando desde el principio».
Parcelas
«Se está trabajando en diferentes lugares: en la Estación Experimental INTA, en el predio del vivero municipal y en parcelas que las agrupaciones recibieron en el INTA. En el caso de laEstación Experimental INTA, se realizan tareas en dos parcelas simultáneamente, una que queda para la temporada otoño/invierno y en otra que se empieza que es para la siembra primavera/verano», detalló jones y explicó que «las expectativas nos superaron, entonces se decidió mover más suelos porque durante el proceso la gente empezó a demandar más y como institución desde el INTA se decidió a empezar a mover más suelos para trabajar. Hoy estamos aproximadamente en 1,5 hectáreas trabajada».