El concejal Sebastián de la Vallina, en conferencia de prensa, se refirió al rechazo por parte de los concejales opositores del proyecto de la Central de Cargas tratado ayer en la sesión del Concejo Deliberante.
De la Vallina lamentó el rechazo «del proyecto que brindaría la posibilidad de la construcción de una Central de Cargas en Trelew mediante desarrolladores externos al Municipio, a través de un convenio que se firmó entre el Ejecutivo Municipal y el sector privado. La celeridad del tratamiento del proyecto se fundamentó en la urgencia de generar trabajo genuino».
En este sentido, explicó que «la oposición no acompañó con los votos este proyecto y hemos venido a explicar al sector de la construcción, uno de los actores que iban a intervenir, de haberse aprobado la iniciativa. Hoy le tenemos que dar la triste noticia de que por el no acompañamiento de cuatro concejales tenemos el riesgo de perder una obra que generaría puestos de trabajo genuino en los próximos meses», ya que , «entre enero y febrero se iban a comenzar los trabajos de movimiento de suelo y las tareas para la primera etapa del proyecto».
«Con este rechazo estamos perdiendo puestos de trabajo, teniendo en cuenta que, hay alrededor de 900 trabajadores de la construcción están sin trabajo y que la vienen luchando en estos últimos cuatro años por las medidas adoptadas por la gestión del Gobierno Nacional saliente, situación que no solo afectó a Trelew sino que se reflejó a nivel provincial con la caída de muchas obras», remarcó De la Vallina.
Asimismo, el concejal destacó que «desde el Ejecutivo Municipal, el gremio de la UOCRA se trabaja y se colabora para que los compañeros puedan llevar un plato de comida a la casa», por lo cual, «vamos a insistir para que esta obra se quede porque no podemos estar pendientes de la irresponsablidad de algunos concejales y perder la podibilidad de tener en la ciudad una obra de tal magnitud que beneficia al crecimiento de la ciudad».
Al hacer referencia al tratamiento del proyecto, el edil indicó que «ayer teníamos la posibilidad después de 30 años de que un grupo inversor emplace en la ciudad una Central de Cargas, que además de generar trabajo en el sector de la construcción iba a continuar creando fuentes laborales en diferentes sectores con las siguientes etapas del proyecto y permitiría la posición de la ciudad como una ciudad de servicios potencialmente a nivel provincial y nacional».
Además recalcó que «es importante que los concejales que no acompañaron expliquen a los trabajadores y a los vecinos los fundamentos que llevaron al rechazo del proyecto, porque decir que no tuvieron tiempo de leer el expediente no es respuesta suficiente, porque la banca que se ocupa elegida por el pueblo es para dar respuestas, trabajar con la celeridad que los proyectos requieren y responsabilidad como concejales electos».
En referencia a los pasos a seguir, luego del rechazo del proyecto señaló que «a partir de ahora queda lamentablemente transmitir a los desarrolladores del proyecto que el expediente no se aprobó y tratar de dialogar para conseguir la posibilidad que nos esperen hasta el año que viene, donde se va a volver a poner en tratamiento el tema para su aprobación», y remarcó que la concreción del proyecto «dependerá de los inversores. A nadie le gusta tener la plata guardada. Además, esta obra se pensaba también en Bahía Blanca».
Por su parte, Juan Villafañe integrante del gremio de la UOCRA, dijo que «esta es una situación muy triste porque dejaron a algunos trabajadores sin la posibilidad de llevar el pan a su hogar. Nosotros como gremio vamos a insistir para que este proyecto se vuelva a tratar».
«No fuimos al Concejo Deliberante para asegurar la paz social y para que los concejales traten con tranquilidad y responsabilidad el proyecto, pero ahora tendríamos que ir con cada concejal que no aprobó el proyecto para que le den trabajo a los compañeros», remarcó Villafañe y anticipó que «que se analiza una movilización en repudio a esta decisión».
«Estos concejales que rechazaron el proyecto no ven la realidad de Trelew y no pasan por el frente de la UOCRA donde están todos los días los compañeros pidiendo trabajo», resaltó Villafañe al tiempo que señaló que actualmente «hay alrededor de mil trabajadores desocupados en todo el Valle».
En tanto, el dirigente sindical de la UOCRA Claudio Paredes destacó «las contradicciones de los concejales que no acompañaron el proyecto porque aducen el derroche que el gobierno realiza en planes, becas y subsidios y no fueron responsables en acompañar un proyecto que traería la generación de fuentes de trabajo con mano de obra local», y dijo que «le sacaron las esperanzas a los trabajadores de tener la posibilidad en los próximos meses de tener su trabajo».
Paredes remarcó que «los tiempos de los trabajadores y de los vecinos de la ciudad son distintos. La necesidad de los trabajadores es urgente y hay que ubicarse en la situación del trabajador que además favorece al crecimiento de la ciudad, porque detrás de esta decisión infundada hay casi mil trabajadores y a sus familias sin un plato de comida», e instó a los concejales que «les den las explicaciones a los trabajadores».